jueves, 30 de abril de 2009

Conciencia



Un texto escrito en Semana Santa, después de una excelente discusión con uno de mis primos favoritos ;D Cualquier comentario será leído con gusto.
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¿Qué separa al animal del hombre? ¿Qué separa al placer de la felicidad? Hoy no consultaré más enciclopedias que las de la propia experiencia. La respuesta a estas dos preguntas es idéntica: La conciencia.

De la primera pregunta mucho se ha hablado ya. Una animal no está conciente de lo que hace, no traza largos planes ni se duele por asesinar, robar o envidiar porque todo ésto no existe en su universo. El humano sí, está benditamente condenado a ser conciente de sus obras y pensamientos.

De la segunda... El placer es fugaz y poco meditado. ¿Qué hay de complicado en saborear un chocolate, deleitarse con buena música o acariciar la piel de otro ser? En cambio, la felicidad es algo mucho más complejo. Exige planeación, sacrificio, esfuerzo, voluntad, sabiduría... Exige además conciencia y total percepción de lo que se hace y piensa.

La felicidad es tan anhelada porque, a diferencia del placer, dura aún si el motivo de felicidad ha acabado ya.

¿Estoy acaso en contra de los placeres? Al contrario, los veo, cuando están bien enfocados y ubicados, como una serie de trampolines que hacen el camino hacia la meta mucho más disfrutable y llevadero. Pueden ser indicadores de que la ruta elegida es la correcta... Aunque pueden ser también motivo de perdición.

Volviendo a las dos preguntas iniciales, diré que la concienca, la capacidad de saber que se está viviendo y sientiendo algo, y sobre todo la seguridad de que se tiene poder sobre lo que se hace con las circunstancias que nos rodean son las que hacen al humano humano, y las que le dan la capacidad de ser feliz.

viernes, 17 de abril de 2009

Estética virtual

Un video que me ha dejado sin palabras... Aún si no entienden mucho el inglés, los efectos de sonido son increíbles. Pónganse unos audífonos y cierren los ojos..
Zatara! =D

martes, 7 de abril de 2009

Los chicos de mi vida


Lo prometido es deuda, aquí está la entrada que fue más votada. Si tardé en ponerla fue porque aún creo que es demasiado poca cosa... Todos éstos hombres merecían un texto mejor. Pero, aquí está.
Por favor, disculpen todos los paréntesis, sé que hacen que la lectura sea más pesada, pero era necesario numbralos
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Lo confieso, ellos me han marcado, me han moldeado, me han dado un trocito de personalidad.

Se dice que cada persona deja una huella, insignificante quizá, pero huella al fin, en las personas que pasan por su vida, y ellos, todos y cada uno de ellos han dejado aunque sea una muesca en mi forma de ser.

Escribo esta entrada con dedos temblorosos, recordando emociones, sentimientos, lágrimas y risas, dulzuras y amarguras, momentos inexpertos, miradas llenas de sabiduría, trozos de verdadero conocimiento, ignorancias inocentes, egoísmo y total entrega... Recordando en fin mis experiencias con cada niño, cada joven, cada hombre que ha llegado a mi vida para hacerla un poco más digna de vivirse.

Es para ustedes caballeros este post por los detalles que han tenido conmigo (Carlos, José Luis, Rodolfo, Alan, Chuch, Julio, Ricky, Luis, Gustavo D, Gustavo R, mis tíos y padrinos, Manolo), para ustedes angelitos por cada sonrisa que me han robado (José Antonio, Memo, Gerardo, Omar, Isaac y todos los nombres que no recuerdo o no llegué a conocer), para ustedes los hombres ya mayores por la sabiduría compartida (Tío Pepe, Padre mío, Paul, mis abuelos, Profesor César,Tuda), para ustedes descarriados que templaron mi carácter (Rello, Sergio Rodolfo, Ricardo), para mis compañeros por ayudarme a vivir día a día (Manu, Omar, Sinco, Diego, Memo, Gustavo, Lalo, José, Rubén y todos los del Chapus) , para mis terapeutas que se preocupan por mis sentimientos (Lalo y Rubén, Enrique, Paul), para los que me hacen reír sin esfuerzo (José, Manolo, Omar) , para los intelectuales que me obligan a pensar (Tenoch, Rodolfo, Enrique), para los que me sirven de modelo y guía en tantas cosas (Mi tío Ángel, mi padrino Heri, mi tío Pepe, mi papá) para todos los que simplemente están, conocidos o desconocidos, para los distantes...

Y en especial, para los dos hombres de mi vida: Mi padre y mi hermano
Y para el hombre que acapara mis pensamientos: Rodolfo

Gracias, mil veces gracias, pues si soy lo que soy lo he sido por ustedes. Gracias por las enseñanzas que jamás podré borrar.

Gracias porque en cada frase escrita aquí he recordado nombres que pasaron por mi mente tan frecuentemente... Porque va dedicado con muchísimo cariño para tantos que son especiales (y algunos que no lo son)

Y Gracias en fin porque hoy puedo decir con toda seguridad que éste mundo no valdría todo lo que vale si no estuvieran ustedes.