Escrito un 24 de febrero, después de ver enojado a un santo (Dedicado Lulazz, que ya me conoce bastante bien =D)
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¡Por favor! ¿Qué tiene de especial un lienzo de tela colgado de un tubo dorado? Díganme ustedes ¿Para qué hacer que toda una escuela suspenda clases y salude a los alumnos de sexto marchando estúpidamente alrededor de la cancha? Visto así, los honores a la bandera carecen de todo sentido.
Sin embargo, he visto a hombres mayores que al pasar una bandera, se levantan con un gran esfuerzo, pero orgullosos y convencidos
He visto a un niño de 10 años regañando a su hermano de 16 por reír al escuchar tambores y trompetas
He visto lágrimas en los ojos de los medallistas cuando se levanta triunfante la bandera y resuena el himno en tierras extranjeras.
Dirán ahora "Todo eso no ocurre por la bandera o el himno. El anciano se levantó porque recordó batallas ganadas que han construido un país, el niño defendió lo que padres y maestros le han enseñado, y el medallista lloraba por saberse victorioso"
¡Y es que ahí está la importancia de los honores a la bandera!
Cuando te piden que cantes con orgullo, o que saludes a la escolta, no es a la tela a la que cantas, no es al poema de Bocanegra al que muestras respeto.
Estás proclamando tu compromiso por hacer lo que te toca, estás gritando tu amor por los que te rodean, estás aceptando con seriedad la responsabilidad de vivir por ti y por todos en este país, estás celebrando tus victorias y las de tus compatriotas.
Por ésto se levanta el anciano, por ésto el niño, sin saberlo aún pero ya sopechándolo, exige respeto, por ésto llora un deportista y junto con él todo un país.
Te pido ahora que la próxima vez que un águila y tres colores pasen frente a ti, levantes la frente y saludes con cariño al símbolo de lo que amas.
¿Es acaso mucho pedir?
